Josep Santaularia Muixi

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SINDROME DEL AHORCAMIENTOMuy ocasionalmente, solo una causa relacionada con el SNC, produce esta sintomatología, normalmente es el proceso evolutivo en el archivo de experiencias, el que acaba manifestando todos los síntomas de manera lenta, dejando que algunos de estos se vayan volviendo crónicos. Si los estados emocionales no varían, el proceso se vuelve cada vez más agudo en un espacio de tiempo más corto.
Los síntomas físicos que presentan este síndrome son:Bruxismo, para mí y según mi experiencia, por esto el nombre síndrome del ahorcamiento, la más importante. Refleja la descarga tensional de sistema nervioso Diurno, durante el día, la persona toma conciencia y es más fácil controlar la tensión que se va acumulando.Hay claramente dos tipos de Bruxismo, posterior y anterior. Posteriorcomprime claramente el maxilar inferior contra la cotila de la articulación, provoca en muchas ocasiones artritis articular, rotura del menisco. Va muy relacionado cuando la persona necesita descargar tensiones (que por algún motivo no descarga en su vida diaria).En ambos casos, en muchas ocasiones se manifiestan signos de vértigo o sensación de inestabilidad, síntomas que no tienen relación con la zona cervical ni con la zona del oído.  Érase una vez una papagaya que estaba sentada en la rama de un árbol en la selva. Tenía unas plumas preciosas, verdes y rojas, pero el plumaje se fue oscureciendo de tanto polvo. La papagaya dejaba colgar su cabeza y ya no gozaba del canto de los otros pájaros, el sol le molestaba por ser demasiado deslumbrante, y las nubes que en tiempos pasados siempre la fascinaban, ahora le parecían amenazadoras. Y temía volar sobre la inmensidad de la selva.
Al pasar el mono Sen paraba un momento y le preguntaba: "¿Papagaya, qué te pasa?"
La papagaya suspiraba, y tras dudas iniciales le contesto: "Tu sabes que nosotros, los papagayos con plumas verdes y rojas muy raras veces ponemos huevos. Y cuando lo hacemos, sólo ponemos un huevo a la vez. Ayer estaba nerviosa y tenía miedo del futuro, y por descuido clavé al huevo un empujón. El huevo se cayó del nido y se rompió. Por esto ahora no sólo estoy triste sino también me siento culpable, pues yo tengo la culpa que se rompiera.
Un poco pensativo el mono dijo: "Esto lo comprendo". El se quedo un poco pensativo porque la papagaya había hecho una mueca muy rara, casi como si ella quería sonreír. Quizás porque así se había ahorrado el trabajo de criar una nueva generación. Pues este trabajo en caso de papagayos tarda mucho tiempo y es muy laborioso.
"¿Tu imbécil de mono, cómo quieres comprender esto?" gritaba la papagaya. "¡Primero, los monos no ponen huevos y segundo eres un hombre y no puedes sentir lo que una madre siente y tercero, vosotros las monos estáis en otra etapa de la evolución que los pájaros Y cuarto, ni siquiera podéis volar!"
"Tienes razón", contesto el mono, "naturalmente lo veo desde otro punto de vista que tu. Pero quizás precisamente por esto puedo ayudarte. Si quieres te cuento una historia de animales que están en otra etapa de la evolución. Estos animales se llaman Seres Humanos.
Última actualización el Viernes, 01 de Abril de 2011 17:42 Página 1 de 2
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